Mes: May 2020
Reflexión 31 de Mayo CoDA
31 de mayo
En este momento,
No tengo que manejar todo.
¿Estoy tratando de hacerlo todo? ¿Estoy
siendo un perfeccionista y controlador,
mientras hago lo que es más apropiado?
¿Me siento angustiado a causa de mi
comportamiento?
En la recuperación, trato comportamientos
saludables. Esto es nuevo y desconocido.
Pero con el ejercicio repetido, se hace más
fácil. Dejo de tratar de controlar todo y darme
cuenta de que soy un ser humano –
perfectamente humano, no un ser humano
perfecto. Es un cambio en la percepción.
Con la guía de mi Poder Superior, la
ingobernabilidad es algo que puedo cambiar.
Pag. 152
Meditación 31 de Mayo …¿Qué tal si?
Un día estaba hablando con una amiga acerca de algo que había planeado hacer. De hecho, me estaba preocupando de cómo reaccionaría una persona en particular hacia lo que yo tenía intención de hacer.
“¿Qué tal si no lo sabe manejar muy bien?, le pregunté. “Entonces”, me dijo mi amiga, “serás tú la que tendrás que manejarlo bien.”
Los “qué tal si” nos pueden volver locos. Ponen el control sobre nuestra vida en las manos de otro. Los “qué tal si” son una señal de que hemos regresado a pensar que la gente tiene que reaccionar de
una manera particular para que nosotros podamos seguir nuestro curso.
Los “qué tal si” son también una clave de que podemos estar pensando si podemos confiar en nosotros mismos y en nuestro Poder Superior para hacer lo que mejor nos conviene. Estos son retazos de maneras codependientes de pensar, de sentir y de comportarse, y son señales de miedo.
Las reacciones, sentimientos, gustos o desagrados de otros no tienen por qué controlar nuestras conductas, sentimientos y dirección. No necesitamos controlar la forma como los otros reaccionan ante lo que
hemos elegido. Podemos confiar en que nosotros , con la ayuda de un Poder Superior, manejaremos cualquier resultado, aun el más incómodo. Y, amigo mío, podemos confiar en que lo manejaremos bien.
Hoy no me preocuparé de las reacciones de los demás o de los eventos que están fuera de mi control. Mejor me concentraré en mis reacciones. Manejaré bien mi vida hoy y confiaré en que, mañana, podré hacer lo mismo.
(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós).
Reflexión del Dia: 31 de Mayo-(Melody Beattie de su Libro Ya No seas Codependiente).
Necesitar tanto a la gente, y sin embargo creer que no somos dignos de ser amados y que la gente nunca estará ahí cuando la necesitemos, puede volverse una creencia profundamente imbuida. A veces, pensamos que la gente no está ahí para ayudarnos cuando en realidad lo está. Nuestra necesidad puede bloquear nuestra visión, impidiéndonos ver el amor que está ahí esperándonos.
En ocasiones, ningún ser humano puede estar ahí para ayudarnos en la forma en la que requerimos, que nos absorba que nos cuide y que nos haga sentirnos bien, completos y seguros. Muchos de nosotros esperamos y necesitamos tanto de la gente que nos conformamos con muy poco.
Podemos volvernos dependientes de personas con problemas, de alcohólicos y otras personas con problemas. Podemos volvernos dependientes de personas que no precisamente nos gustan ni amamos. A veces, necesitamos tanto de la gente que nos conformamos casi con quien sea. Podemos necesitar a gente que no satisface nuestras necesidades. De nuevo, podemos encontrarnos en situaciones en las cuales necesitamos que alguien esté ahí para apoyarnos, pero que la persona que hemos elegido no puede o no podrá hacerlo.
Es posible incluso llegar a convencernos a nosotros mismos de que no podemos vivir sin alguien y que nos marchitaremos y moriremos si esa persona no está dentro de nuestra vida.
(Melody Beattie de su Libro Ya No seas Codependiente).
LIBRO UN AÑO DE MILAGROS: DIA 165
PARA REFLEXIONAR
Reclamar los conocimientos del corazón.
El significado no está dentro de los objetos, sino dentro de nosotros mismos.
Cuando valoramos cosas lejanas al amor el dinero, el coche, la casa, el prestigio ponemos nuestro afecto sobre cosas que a su vez no pueden amarnos. Estamos en la búsqueda de significado con aquello que no lo tiene.
El dinero en sí mismo no significa nada. Las cosas materiales, en sí mismas, no significan nada. No es que sean malas. Es que son nada.
Estamos en este mundo para crear con Dios al prodigar el amor. La vida que se vive con otros propósitos en mente resulta banal, contraria a nuestra
naturaleza y, finalmente, dolorosa. Es como si estuviéramos perdidos en un oscuro universo paralelo donde las cosas son amadas más que las personas.
Sobrevaloramos lo que percibimos con nuestros sentidos físicos e infravaloramos lo que es verdad en nuestros corazones. Es el momento de reclamar los conocimientos de nuestro corazón, para que el mundo sea libre.
Marianne Williamson